P asa. Pasa que uno se va cansando. Pasa que queremos cambiar, y crecer siempre. Pasa que nos deja de interesar, o que dejamos de interesarle. Pasa. Luego, se escucha un estruendo. Cuando volteamos todo ha explotado a nuestras espaldas. No queda nada. Nunca prestamos atención a ese reloj que detona la bomba. Solo pasa. De pronto, volteas, todo se cae y esta en llamas. Solo camina, no mires atrás y sigue caminando. Después del estruendo no hay nada que salvar. Debiste poner atención, pero no lo hiciste. Ya es tarde. Pasó. La explosión se llevo todo, rompió los vidrios, quemó los muebles, no dejo rastro de ningún libro, los lapices del escritorio saliendo volando por los aires; y ahora, ahí tirado en el piso, se perciben pedazos de algo que en algún momento tuvo forma. No lo escuchaste. Todo el tiempo ese "Tic Tac" estuvo razonando en tus oídos; no lo quisiste atender. Se fué haciendo mas fuerte, cada vez más, no hiciste nada. En ningún momento; ni siquiera cuan